“De ahí nuestro planteamiento central es que se pueda iniciar una transformación real hacia un sistema de agricultura de que ya no prevalezca sólo el fertilizante químico, los plaguicidas, sino que se asesore, desde la Sader, una visión agroecológica, de manera real y no con discursos o con conferencias sino que pueda haber programas reales que impulsen la producción nacional”, apuntó.
El ingeniero agrónomo afirmó que estamos en momentos terminantes para consolidar el rescate del agro nacional como parte esencial de la cuarta transformación, como única vía para revertir la crisis ambiental, alimentaria, social y económica del sector agroalimentario heredada de las políticas anti campesinas.
“Pugnamos por encaminar a México por un rumbo diferente al neoliberal que implica una nueva estructura de las políticas públicas en armonía con la nueva política agrícola expresada en el Presupuesto del “Programa Especial Concurrente” (PEC), y con un mejor manejo del gasto público rural”.
Reflexionó en el sentido de que en la coyuntura, es recomendable, para el 2023, mantener un crecimiento del monto del PEC en términos reales, donde el eje central no sea únicamente el valor, ”sino profundizar en la reorientación de las estrategias específicas que permitan liberar el potencial productivo de las pequeñas y medianas unidades de producción y se orienten de manera urgente, sistémica e integral y a nivel nacional, hacia nuevos paradigmas sostenibles emanados de la agricultura agroecológica”.
Con relación al padrón de Agricultura-Bienestar, dijo que el que se elaboro respecto a los beneficiarios de los pequeños productores, no es satisfactorio, y recordó que como se ha denunciado ya por muchos compañeros, “la manipulación que hicieron los servidores de la nación, para incorporar a la gente al padrón”. Por ello, insistió en depurar este padrón para incluir a todos los que quedaron fuera por razones no muy claras, y que cumplieron con todos los requisitos y que hasta el momento no están siendo apoyados.
“Son campesinos, no ricos, del sector medio de la clase campesina. No tienen ningún respaldo, no hay ningún programa de fomento de infraestructura para canales de comercialización y, ellos, están asumiendo toda su costo de producción a través del presupuesto que les ponen en disposición los proveedores, los que les venden las semillas, los fertilizantes, la maquinaria; esos son los que están financiando el mercado rural interno. Son campesinos que no están recibiendo los apoyos necesarios”.
Por ello, volvió a insistir en que el planteamiento del Movimiento, por tanto, es reajustar la política agropecuaria para que este sector de la economía campesina tenga acceso al presupuesto y, además, “estamos planteando por ello, que haya un incremento de 14 mil millones de pesos aproximadamente para que se pueda atender esta necesidad de la economía campesina que atiende todo el mercado interno”.
Se le preguntó ¿Quién está fallando, el Presidente o sus funcionarios responsables del sector?
A lo que respondió que el planteamiento es que se incremente en 14 mil millones el presupuesto del PEC y que se haga un ajuste importante de política pública para que se generen programas que sí apoyen al campesino mexicano.
“Hoy, las trasnacionales siguen dictando el modelo de la agricultura en el país. No se ha combatido para nada y la cabeza de la Sader (Víctor Villalobos), sin duda, está en esa lógica, es parte de ese proceso que es la consolidación de la agricultura capitalista, de la visión de la revolución verde y no hay disposición, por tanto, de la Secretaria para cambiar este esquema.
“Esto, para nosotros –agregó- es lo que está fallando en el gobierno del presidente y por eso planteamos esta propuesta de desde una visión crítica pero solidaria, porque nosotros peleamos por este gobierno y creemos que debe perfeccionarse y de avanzar en un sentido mucho más amplio y más positivo para el campesino que le está dando de comer al país”.
Aseguró Duran Vera que la agricultura capitalista no necesita presupuesto; un dinero fiscal que no debería ser para ellos, y crítico que tampoco se está apoyando a quienes realmente está produciendo la mayor cantidad de alimentos para consumo interno.
“El padrón de agricultura de bienestar es prácticamente de autoconsumo, muy poco se comercializa y los sistemas de comercialización que hay ahora, a través de Segalmex, son deficientes. No hay modo de que los campesinos puedan vender a Segalmex, y tener el precio de garantía, porque hay una enorme manipulación al igual que los padrones de agricultura bienestar, pues solo se puede comercializar con Segalmex si se está en el padrón y se utiliza el nombre de los que están en él para beneficiar a otros. Se manipula también el padrón”, recalcó.
Inclusive, alegó que Segalmex debe estar para apoyar la comercialización de pequeños y medianos productores y no esté solo sirviendo para la importación, pues “con Manuel Cota al frente, esperemos que no se repita la corrupción como sucedió con Ignacio Ovalle”. De igual manera, con muchas mañas, comentó, se trabaja en la Procuraduría Agraria, en la Sedatu, y en el RAN.
Los voceros, en esta ocasión del Movimiento “Plan de Ayala Siglo XXI” –que la integran indicaron que aunque en años anteriores no se le ha modificado un solo peso al presupuesto de la Ley de Egresos, sin embargo, tienen confianza de que la coyuntura electoral de fin de sexenio permita que se hagan ajustes importantes, a partir de su propuesta y que entregaran a la Cámara de Diputados.
Las organizaciones que integran el Movimiento Campesino, Indígena y Afromexicano “Plan de Ayala Siglo XXI” son: Central de Organizaciones Campesinas y Populares COCyP, Imelda Alquicira Arenas; Unión Campesina Democrática (UCD), José Duran Vera; Unión Nacional de Organizaciones Regionales Campesinas y Autónomas (UNORCA), Macario Hernández Hernández; Promotora de Gestión y Enlace para el Desarrollo Rural (PROGEDER), Roció Miranda Pérez; Central Independiente de Obreros, Agrícolas y Campesinos (CIOAC-JDLD), José Dolores López Barrios; Central Campesina Cardenista (CCC) Max Agustín Correa Hernández; Asociación Nacional de Empresas Comercializadoras de productores del Campo (ANEC), María Leticia López Zepeda; Sindicato de Trabajadores del INCA Rural (STINCA), Rosalba Calva Flores; Asociación Promotora Nacional para el Desarrollo Rural y Urbano (APNDRU), Alfonso Rodríguez Chanes; Coalición Obrera, Campesina, Estudiantil del Istmo (COCEI), Leopoldo de Gives de la Cruz y, Centro de la Mujer Mexicana Grupo Nantli (CMMGN), Angélica de la Torre.