TÓPICOS POLÍTICOS
* En plena pandemia, son obligados a formarse en plena calle para entrar a la oficina ‘a tomarse la foto’; la orden es girada por el coordinador de Métodos de Investigación, Felipe de Jesús Gallo Gutiérrez, a raíz del asalto millonario en la residencia de Atizapán de Zaragoza
POR EL TOPO
La Fiscalía General de la República (FGR) se convirtió en área de ingresos de un reclusorio en la Ciudad de México (CDMX), en donde fichan a todos los delincuentes que ingresan por diferentes delitos.
Resulta que en las oficinas de la Agencia de Investigación Criminal (AIC), situada en la calle de Moneda 333, colonia Lomas de Sotelo, perímetro de la alcaldía Miguel Hidalgo, están fichando a todo el personal, mujeres y hombres, desde delegados regionales hasta tropa.
La orden, girada por el coordinador de Métodos de Investigación, Felipe de Jesús Gallo Gutiérrez, es que todo el personal debe portar el uniforme compuesto de pantalón beige y camisa verde botella.
Para llegar al interior de las instalaciones tienen que formarse, luego pasar a una oficina, ahí les colocan un número en la espalda y en el pecho, los retratan de frente y de perfil, les toman huellas dactilares y finalmente leen un discurso para grabar su voz.
LA FICHA, MEDIDA IMPLEMENTADA TRAS EL ROBO MILLONARIO EN RESIDENCIA DE ATIZAPÁN
Tal medida de “control” del personal es denominada “Prueba de la Vida”, implementada por Gallo Gutiérrez, es a raíz del millonario saqueo cometido a la casa de un empresario petrolero en el fraccionamiento Valle Escondido, situada en la Zona Esmeralda de Atizapán de Zaragoza, Estado de México, en el que participaron policías de esa corporación y se llevaron 20 millones de dólares, vehículos particulares, motocicletas e incluso joyas tanto del empresario como de su esposa.
La Unidad Administrativa de la organización regional de la Policía Ministerial en la CDMX, ubicada en la AIC, está enviando a los delegados regionales de 31 estados una relación del personal que se encuentra comisionado con ellos para que se presenten en dichas instalaciones a que les apliquen la “Prueba de la Vida”, una medida que para muchos es calificada como ficharlos, como si fueran vulgares delincuentes.
Para este martes 13 de mayo están citados el delegado regional de Querétaro, Víctor Hugo Sánchez Muñoz, al que le enviaron un documento que a la letra dice: “Relación del personal de la Unidad Administrativa que acudirá al pase de lista y prueba de vida en el segundo bloque el día 13 de mayo del 2020”.
Seguramente la “Prueba de Vida” es una frase salida de la mente maquiavélica de algún funcionario “cerebrito” de dicha corporación y algunos policías inconformes, de los cuales por razones obvias no decimos sus nombres ni comisiones, indicaron que “sólo faltó en la ficha el delito y hora de ingreso. Nos están tratando como vulgares delincuentes por los altos mandos de la FGR”.
Un dato curioso es lo que manifiestan los policías indignados: Afirmaron que en “el archivo de policías delincuentes” no figuran Gallo Gutiérrez ni el jefe de la Unidad de la Policía Ministerial, Karosci Guerrero Ortega, ni sus esbirros”, porque -como se rumora- a ellos los protege una persona de nombre “Alejandro”.
Se logró saber que a todo el personal de la FGR se le aplicará la “Prueba de la Vida”, a excepción del delegado regional y su personal comisionado en Tijuana, Baja California, por lo que ellos no serán fichados como si fueran delincuentes.
SE PASAN ‘SUSANA DISTANCIA’ POR EL ‘ARCO DEL TRIUNFO’
El Presidente Andrés Manuel López Obrador ordenó al subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell Ramírez, anunciar la cuarentena a nivel nacional para erradicar la propagación del virus chino y devolver la paz y tranquilidad a los 120 millones de mexicanos.
Sin embargo, en la AIC esas instrucciones se las han pasado por el “arco del triunfo”, pese a que en dichas oficinas fueron las primeras de la FGR a las que les brotó el virus chino en tres elementos de la Policía Ministerial.
Tal parece que el padrino de Gallo Gutiérrez y Karosci Guerrero, conocido como “Alejandro”, es influyente y les permite que violen todas las disposiciones aplicadas por las autoridades sanitarias para frenar la propagación del coronavirus, dando a demostrar que a los policías de esa oficina lo que les interesa es continuar aplicando los viejos vicios de la corrupción y haciendo quedar mal al Presidente López Obrador en su combate a la impunidad.
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